Una de las cosas que le agradezco a mi familia es haber podido conocer el mar desde muy pequeño.
Concretamente desde los dos meses. Esa vez fue en Coveñas.
Si uno usara pasaporte para moverse dentro de Colombia, tendría varios sellos de ciudades costeras: Tolú y Coveñas tres veces, Cartagena un par de veces, Santa Marta un par de veces, Arboletes una vez, Buritaca una vez, San Andrés una vez...
Ahora que lo pienso: eso sería muy espantajopo. En fin, sigamos...
En menos de 24 horas su servidor se desplazará, de nueva cuenta, al mar.
Y como la culpa me carcomía por no hacer nada interesante en este blog, decidí intentar algo.
Un día, no recuerdo con quien, me di a la tarea de hacer una lista de canciones sobre cierto tema.
Parte de conocer el mar desde pequeño es saber que, según el lugar, la temporada del año y la moda del momento, hay música que ambienta tu estadía en la playa.
En el 99.9% de los casos, las canciones playeras son para bailar apretadito y copular sin remordimiento.
Pero esto es diferente.
Esta es una lista de canciones tristes que tienen el mar como escenario.
Nunca estuvo tan garantizado el intento de suicidio en la playa (?).
Vamos pues, a lo que te traje:
(aclaración pertinente: no están escogidas en ningún orden)
1. Agobio - Combo de las Estrellas: "Agobiado me confundo, con otro la vi marchar / Su recuerdo tiro a lo profundo y él vuelve a la orilla del mar"
Un clásico de los diciembres en Medellín (y en Coveñas, que en temporada alta es Campo Valdés con salida al mar). Es una debilidad del aquí firmante por una razón: es una canción perfectamente bailable y que casi siempre se asocia a momentos familiares o felices, pero que cuando la oyes con detenimiento te transmite una sensación radicalmente diferente. Coming soon un especial sobre canciones alegres pero tristes.
2. Beyond the sea - Bobby Darin: "Somewhere beyond the sea / She's there watchin' for me / If I could fly like birds on high / Then straight to her arms, I'd go sailin'"
Esta es la más alegre de todas, creería yo. Una canción hermosa que te deja claro que la distancia (en este caso, del ancho del mar) a veces es tan grande como el anhelo. Ah, además fue parte de la banda sonora de Goodfellas y Buscando a Nemo: solo por eso hay que amar fuerte esta canción.
3. A la orilla del mar - Bienvenido Granda: "Luna: ruégale que vuelva / Y dile que la quiero / Que solo la espero / En la orilla del mar"
¿Boleros que hablen del mar? Cientos. Muchos de ellos con la voz del Bigote que Canta. Escogí este porqueme salió de los cojones cuatro versos pueden sintetizar la soledad de un amante abandonado. Y se repite la condición de la primera canción: es un tema bailable, con un ritmo que está lejos de ser sombrío, pero es triste.
4. Marejada - Roberto Antonio: "Fue tu amor cual marejada / que inundó mis sentimientos / y hoy no aguanto este tormento / que me quema que me quema / por tenerte otra vez"
Ah, qué lindo el merengue venezolano de balneario. Gran parte de mi generación fue concebida con esa música. Vamos a ser sinceros: esta entró por puro capricho, porque del mar mucho no habla. Simplemente necesitaba un símil y le salió ese. En todo caso, se repite la misma historia: es un merengazo rompecintura triste. Suena raro, es una contradicción hasta biológica (?), pero existe.
5. Marejada feliz - Roberto Roena y su Apollo Sound: "Todas las noches me voy / junto a la orilla del mar / a preguntarle a las olas / si han visto mi amor pasar"
Y esta es, en la humilde opinión del aquí firmante, una de las obras maestras de la salsa. Es de esas canciones que hay que proteger en caso de apocalipsis, por si una forma de vida superior se desarrollase en el planeta pueda disfrutarla. Creo que todos nos la sabemos y creo que no hay que explicar nada. O bueno, tal vez algo sí: ¿De dónde mierda Marejada feliz si es una de las letras más desgarradoras que existe en la salsa? Quiero creer que es un recurso literario para acentuar esa sensación de pena. Más o menos como la música que suena cuando Mr. Blonde le corta la oreja al policía en Reservoir Dogs.
6. Como no voy a llorar - Héctor Lavoe: "Me dejó esperando solo en la bahía / se fue caminando hacia el medio día / la estoy esperando y llorando desde el medio día"
Se repite la historia: está casi en las antípodas de un Crímenes perfectos, pero te cuenta la historia de un tipo que vio partir al amor de su vida sin fecha de regreso. Ahora, esta canción (como muchas en la discografía de Héctor Lavoe) es una reinterpretación de algún tema más antiguo...
7. Plena española - Cortijo y su Combo: "Carolina Carolina Carolina / yo estoy sufriendo y tú lo sabes Carolina / esperaré con mucha fe porque sé bien / traerá pronto la vida mía"
...y esta es la canción que originó la anterior, esta vez en la voz de Ismael Rivera. Ha tenido tantas y tantas versiones que su letra es casi un dato de cultura general. En todo caso les aclaro: Carolina es el nombre del barco, no de la vieja. Mención de honor a una parte de la letra que es brillante: "Como voy a echar de menos el pescaíto con harina que me cocinaba".
8. En el muelle de San Blas - Maná: "Su cabello se blanqueó / pero ningún barco a su amor le devolvía / y en el pueblo le decían / le decían la loca del muelle de San Blas"
Usted, querido lector, creerá que Maná en esta lista queda como un moco en la corbata. Y la respuesta es no. Puede que Maná raye en el gusto culposo, pero esto es un temazo. Y con una historia de fondo que tiene tanto de real como de triste. De verdad, léanla, no pierden nada. ¿La canción logra transmitir la idea de la historia? Indudablemente. Chapeau.
9. El mar y yo - Pedro Conga: "Hice un trato con el mar / un deseo poco extraño: / Que cada vez que te bañes en él / se te caiga el traje de baño"
Ahora algo más ligerito: una salsa que está entre lo trágico y lo cómico. El tipo quería escribir el nombre de su amor en la arena, tal vez para tomarle foto y subirla a instagram, y el mar dijo que ni por el putas porque esa vieja era muy grilla. En fin, sigamos.
10. La playa - La Oreja de Van Gogh: "Más de cincuenta veranos / hace hoy que no nos vemos / ni tú, ni el mar ni el cielo / ni quien me trajo a ti"
¿Alguien se ha puesto a pensar la cantidad de tusas y potenciales suicidios que debe tener Amaia Montero a sus espaldas? Esta canción es un ejemplo de ello. Aunque, sobra aclarar, enunciar esto no implica que crea que la canción sea mala: todo lo contrario. Además se remite a un concepto tan viejo como el tiempo y tan universal como la Coca-Cola: todos tuvimos ese tipo de amor de verano con el que no pasó nada y nos dejó de psicoterapia.
11. Huellas en la bajamar - Hombres G: "Tengo miedo y frío en la bajamar / ya se hace de noche y tu no estás / y te llamo a gritos en el mar / y una ola viene en tu lugar"
Ah, mis amados Hombres G: típica banda de pubertos clase alta que, por una u otra razón, significa un montón para nosotros. El Tr3sDeCorazón madrileño (?) tiene muchas canciones playeras, pero esta va en contravía. ¿Qué le queda a uno cuando el amor deja de funcionar? ¿Cómo haces cuando no obtienes las respuestas que necesitas para obtener quinientos pesitos de paz mental? Como dice Nelson Muntz: me gusta llorar en el océano porque solo ahí mis lágrimas parecen pequeñas.
12. Mar y luna - Chico Buarque: "Amaron amor urgente / las bocas saladas por la marejada / las costas dañadas por las tempestades / en esa ciudad tan distante del mar"
Cualquier cosa que se diga sobre esta obra de arte va a restarle belleza. Así que nada, escúchenla. Háganse ese favor.
13. La marea - Rubén Blades y Seis del Solar: "Tu amor, como la marea: / a su hora llega y a su hora se va / mi amor, como un barco queda / atrapao en la arena de la soledad"
¿Ya les dije que amo a Rubén Blades? Pues eso, amo a Rubén Blades. Todos hemos padecido ese tipo de amores inconstantes. Son un dolor en el alma y en los huevos. Y la pregunta es la misma siempre: "no se que hacer contigo / si me olvido de ti o te vuelvo a esperar".
14. Alfonsina y el mar - Mercedes Sosa: "Un sendero solo de pena y silencio llegó / hasta el agua profunda"
Cerramos por todo lo alto, con la nunca bien ponderada Negra Sosa. Es un poema de incomparable belleza basado en otro poema, esta vez de Alfonsina Storni. La historia de su muerte está acá. Todo, absolutamente todo, conmueve hasta las lágrimas: la interpretación de Mercedes Sosa, la letra, la melodía, la historia de Alfonsina Storni y la razón por la cual decidió irse por voluntad propia de este mundo.
Esta es la más alegre de todas, creería yo. Una canción hermosa que te deja claro que la distancia (en este caso, del ancho del mar) a veces es tan grande como el anhelo. Ah, además fue parte de la banda sonora de Goodfellas y Buscando a Nemo: solo por eso hay que amar fuerte esta canción.
3. A la orilla del mar - Bienvenido Granda: "Luna: ruégale que vuelva / Y dile que la quiero / Que solo la espero / En la orilla del mar"
¿Boleros que hablen del mar? Cientos. Muchos de ellos con la voz del Bigote que Canta. Escogí este porque
4. Marejada - Roberto Antonio: "Fue tu amor cual marejada / que inundó mis sentimientos / y hoy no aguanto este tormento / que me quema que me quema / por tenerte otra vez"
Ah, qué lindo el merengue venezolano de balneario. Gran parte de mi generación fue concebida con esa música. Vamos a ser sinceros: esta entró por puro capricho, porque del mar mucho no habla. Simplemente necesitaba un símil y le salió ese. En todo caso, se repite la misma historia: es un merengazo rompecintura triste. Suena raro, es una contradicción hasta biológica (?), pero existe.
5. Marejada feliz - Roberto Roena y su Apollo Sound: "Todas las noches me voy / junto a la orilla del mar / a preguntarle a las olas / si han visto mi amor pasar"
Y esta es, en la humilde opinión del aquí firmante, una de las obras maestras de la salsa. Es de esas canciones que hay que proteger en caso de apocalipsis, por si una forma de vida superior se desarrollase en el planeta pueda disfrutarla. Creo que todos nos la sabemos y creo que no hay que explicar nada. O bueno, tal vez algo sí: ¿De dónde mierda Marejada feliz si es una de las letras más desgarradoras que existe en la salsa? Quiero creer que es un recurso literario para acentuar esa sensación de pena. Más o menos como la música que suena cuando Mr. Blonde le corta la oreja al policía en Reservoir Dogs.
6. Como no voy a llorar - Héctor Lavoe: "Me dejó esperando solo en la bahía / se fue caminando hacia el medio día / la estoy esperando y llorando desde el medio día"
Se repite la historia: está casi en las antípodas de un Crímenes perfectos, pero te cuenta la historia de un tipo que vio partir al amor de su vida sin fecha de regreso. Ahora, esta canción (como muchas en la discografía de Héctor Lavoe) es una reinterpretación de algún tema más antiguo...
7. Plena española - Cortijo y su Combo: "Carolina Carolina Carolina / yo estoy sufriendo y tú lo sabes Carolina / esperaré con mucha fe porque sé bien / traerá pronto la vida mía"
...y esta es la canción que originó la anterior, esta vez en la voz de Ismael Rivera. Ha tenido tantas y tantas versiones que su letra es casi un dato de cultura general. En todo caso les aclaro: Carolina es el nombre del barco, no de la vieja. Mención de honor a una parte de la letra que es brillante: "Como voy a echar de menos el pescaíto con harina que me cocinaba".
8. En el muelle de San Blas - Maná: "Su cabello se blanqueó / pero ningún barco a su amor le devolvía / y en el pueblo le decían / le decían la loca del muelle de San Blas"
Usted, querido lector, creerá que Maná en esta lista queda como un moco en la corbata. Y la respuesta es no. Puede que Maná raye en el gusto culposo, pero esto es un temazo. Y con una historia de fondo que tiene tanto de real como de triste. De verdad, léanla, no pierden nada. ¿La canción logra transmitir la idea de la historia? Indudablemente. Chapeau.
9. El mar y yo - Pedro Conga: "Hice un trato con el mar / un deseo poco extraño: / Que cada vez que te bañes en él / se te caiga el traje de baño"
Ahora algo más ligerito: una salsa que está entre lo trágico y lo cómico. El tipo quería escribir el nombre de su amor en la arena, tal vez para tomarle foto y subirla a instagram, y el mar dijo que ni por el putas porque esa vieja era muy grilla. En fin, sigamos.
10. La playa - La Oreja de Van Gogh: "Más de cincuenta veranos / hace hoy que no nos vemos / ni tú, ni el mar ni el cielo / ni quien me trajo a ti"
¿Alguien se ha puesto a pensar la cantidad de tusas y potenciales suicidios que debe tener Amaia Montero a sus espaldas? Esta canción es un ejemplo de ello. Aunque, sobra aclarar, enunciar esto no implica que crea que la canción sea mala: todo lo contrario. Además se remite a un concepto tan viejo como el tiempo y tan universal como la Coca-Cola: todos tuvimos ese tipo de amor de verano con el que no pasó nada y nos dejó de psicoterapia.
11. Huellas en la bajamar - Hombres G: "Tengo miedo y frío en la bajamar / ya se hace de noche y tu no estás / y te llamo a gritos en el mar / y una ola viene en tu lugar"
Ah, mis amados Hombres G: típica banda de pubertos clase alta que, por una u otra razón, significa un montón para nosotros. El Tr3sDeCorazón madrileño (?) tiene muchas canciones playeras, pero esta va en contravía. ¿Qué le queda a uno cuando el amor deja de funcionar? ¿Cómo haces cuando no obtienes las respuestas que necesitas para obtener quinientos pesitos de paz mental? Como dice Nelson Muntz: me gusta llorar en el océano porque solo ahí mis lágrimas parecen pequeñas.
12. Mar y luna - Chico Buarque: "Amaron amor urgente / las bocas saladas por la marejada / las costas dañadas por las tempestades / en esa ciudad tan distante del mar"
Cualquier cosa que se diga sobre esta obra de arte va a restarle belleza. Así que nada, escúchenla. Háganse ese favor.
13. La marea - Rubén Blades y Seis del Solar: "Tu amor, como la marea: / a su hora llega y a su hora se va / mi amor, como un barco queda / atrapao en la arena de la soledad"
¿Ya les dije que amo a Rubén Blades? Pues eso, amo a Rubén Blades. Todos hemos padecido ese tipo de amores inconstantes. Son un dolor en el alma y en los huevos. Y la pregunta es la misma siempre: "no se que hacer contigo / si me olvido de ti o te vuelvo a esperar".
14. Alfonsina y el mar - Mercedes Sosa: "Un sendero solo de pena y silencio llegó / hasta el agua profunda"
Cerramos por todo lo alto, con la nunca bien ponderada Negra Sosa. Es un poema de incomparable belleza basado en otro poema, esta vez de Alfonsina Storni. La historia de su muerte está acá. Todo, absolutamente todo, conmueve hasta las lágrimas: la interpretación de Mercedes Sosa, la letra, la melodía, la historia de Alfonsina Storni y la razón por la cual decidió irse por voluntad propia de este mundo.
إرسال تعليق